Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, uno de los principales ejemplos es el como cada vez vemos más marcas y productos en inglés.
Actualmente el idioma inglés es el 3er lenguaje más hablado al rededor de todo el mundo, solo debajo del Español y el Chino. Tal vez el hecho de no ser el primero o segundo nos haga pensar que podemos obviar el aprenderlo, sin embargo el inglés es el idioma de los negocios y de las disciplinas, todo producto importado tiene al menos un apartado de instructivos en inglés, mas no siempre en español.
Por eso te listamos 5 razones por las cuales deberías aprender inglés a una edad temprana:
No hay prejuicios.
Siendo niños estamos libres de prejuicios, lo cual, al estar en contacto con personas que dominan el otro idioma nos ayuda a ser más empáticos y tener menos barreras mentales, lo cual aumenta nuestra habilidad para aprender.
Los que aprenden un segundo idioma tienen un mejor desarrollo cognitivo.
Al estudiar una segunda lengua como en este caso el inglés, se potencian las habilidades cognitivas, como la retención a corto y largo plazo. En la escuela estas habilidades se explotan con problemas matemáticos, pero nada mejor como aprender idiomas desde temprana edad para mejorar dichas aptitudes.
Aprender un segundo idioma facilitará adquirir un tercero.
Cuando un niño aprende inglés, su capacidad de aprender un tercer idioma se multiplica dado a las conexiones neuronales que ha trabajado, ahora con la capacidad de diferenciar vocablos de su lengua materna y la lengua inglés, puede también relacionar y diferenciar con mayor facilidad otros idiomas que se proponga.
Estudiar inglés abre las puertas de las posibilidades.
El idioma inglés es el idioma de los negocios, ya lo deciamos anteriormente, en general ya sea en juguetes, videojuegos, armables ó productos importados, siempre tienen un apartado en inglés, mas no siempre en español. El idioma inglés nos acerca a una cultura globalizada en el cual la mayoría se puede entender, dialogar y negociar.
Es divertido.
Los métodos creativos y didácticos son los favoritos de los niños, por lo cuál aprenden divirtiéndose. Los padres y maestros deben aprovechar estos momentos para que los niños puedan seguir su proceso de aprendizaje sin que esto parezca una labor tediosa o aburrida.
